miércoles, 11 de julio de 2007

EL LENGUAJE TELEVISIVO DE LA GUERRA

Ó 10 sencillos pasos para el periodista que quiere contar la verdad sin que se le indigeste la sangre

1- Nunca llame usted las cosas por su nombre.

2- Observe la regla número uno especialmente con la palabra “muerto”, que puede sustituir por: cadáver (siempre que dentro de la frase se entienda que se está hablando de un objeto, no de una persona), daños personales irreparables, estado de salud crítico irreversible, baja, o la expresión más recomendable: daño colateral.
El objetivo de esta regla es que el espectador no sepa finalmente si habla usted de decesos humanos, de la seguridad social o de la altura de una atleta de gimnasia rítmica. Conviene preceder la noticia con otra de estas características para que la confusión sea total.

3- Observe la regla número uno también con la palabra “guerra”, fácilmente sustituible por: conflicto armado, incidentes violentos, violencia generalizada, guerrilla (el diminutivo transmite tranquilidad al público), frente armado, o la más cool: post guerra con incidentes terroristas.

4- No tan importante, pero aconsejable es también omitir la palabra “ejército”, sobre todo si la noticia va a ser recibida por el público de un país democrático. Le aconsejamos que utilice los sinónimos: soldados, defensores, aliados o tropas, este último vocablo siempre acompañado del sufijo “en misión humanitaria”.

5- Sírvase prohibirse usted mismo las palabras “sangre”, "sufrimiento" o “dolor”.

6- Nunca haga referencia a si estas decisiones han pasado o no por el Congreso.

7- Para evitar el aburrimiento del público, jamás informe sobre el origen del conflicto. Si no le queda más remedio, busque alguna razón plausible y estúpida por la que la gente es capaz de matarse; a saber: religión, diferencias étnicas, cabezonerías históricas, reivindicaciones farmacéuticas o Helena de Troya; pero jamás mencione las palabras “capital”, “petróleo”, “Monsanto”, “esclavitud” o “neocolonialismo”. Tampoco debe usted mezclar el concepto de guerra con el vocablo “globalización”.
Se sobreentiende que el público está lo suficientemente preparado para saber todo ésto con más exactitud que el informador.

8- No dedique más de dos minutos a la noticia.

9- Inmediatamente después, pase a otro tema tipo: la liga de fútbol, los sanfermines o Isabel Pantoja.

10- Y las reglas de oro.: A) Recuerde: cualquier autocensura siempre es poca. B) Si quiere ser realmente honesto, dedíquese a otra cosa.